Mis disculpas si las imágenes están medio pelo, denle un poco de apoyo si les viene gustando la historia. Ya saben se aceptan todo tipo de criticas






Effy abrió los ojos, y allí estaba Zewi a su lado, profundamente dormido. Se movió lentamente para no despertarlo, hasta quedar de lado, rostro con rostro. Quien sabe cuanto tiempo se quedo así, segundos, minutos. Penso para si misma que no podía existir un momento mas perfecto, tan feliz, quería quedarse así par siempre. Subio su mano suavemente por la espalda de Zewi, la recorrió con los dedos tomándose todo el tiempo del mundo, siguió así, hasta llegar a la mejilla, para seguir hasta la cabeza de zewi y detenerse en su cabello en mimos de puro amor, ella sentía que que no importaba si el mundo acababa ahí, porque estaba donde quería y tenia mas de lo que alguno vez pudo imaginar. Siguió así, mimándolo y viéndolo existir a su lado, entonces Zewi movió su cabeza, como cual gatito que busca la mano que lo acaricia y sin decir nada ni abrir los ojos, se acerco a Effy, paso un brazo por debajo de la cintura y otro por encima, se acerco hasta posar su cabeza en el pecho de Effy, y allí se regodeo en ese gesto tan rico de confort que se suele hacer con la cabeza en la almohada, para amullarla a gusto. La abrazo con mas fuerza hasta que ya no hubo distancias entre sus cuerpos, Effy entendió y lo apapacho entre sus brazos dándole unos suaves besos en frente.
-Effy, crees que nos conocemos de otras vidas o que después de esta nos vamos a volver a ver?- Dijo con voz suave, todavía adormilado, mientras fue depositando besos en su pecho para terminar con otros en su cuello y así volver a su posición original, nuevamente con ese gesto de cabeza y almohada. -Yo creo si- se respondió solo.
Effy no respondió, ella entendía muy bien lo que zewi le quiso decir, no se trataba de un problema existencial o de una fantsia del ser mortal, sabia muy bien, que Zewi le quiso decir, es que la elijiria en la infinidad una y otra vez.
-Zewi, abrí esos ojitos y mírame- le susurro al oído. Zewi levanto la cabeza a besitos hasta llegar a los labios de Effy, dio todos los besos que pudo dar con todo el amor que pudo soltar en los segundos que se tomo, quedo cara a cara con Effy y abrió los ojos y se lleno de amor (los ojos azules de Effy y calidez de su mirada siempre le hacían sentir lo mismo que sintió hacia ya un año cuando la vio por vez primera, que el mundo podía terminar ahí)
-Dale, dispara antes que no me resista a comerte la boca (dijo con una sonrisa)
-Creo que deberíamos vivir juntos, digo como que casi que ya lo hacemos y tampoco hay nada que nos lo impida, aparte ahorraríamos en gastos y podríamos viajar más, aparte..... Zewii la callo con tierno beso, se tomo su tiempo en cada roce, para decir. -pensé que jamas lo dirías, me haces feliz de muchas maneras, me haces tanto bien, que ya no recuerdo como era vivir sin vos. Sabelo, ahora no te podes retractar- volvió a reír y se levanto. Mientras se dirigía al baño, soltó. -¿Salimos a desayunalmorzar ?







Comieron cositas ricas y hablaron de sus planes, de cuando se mudaria Zewi, de las cosas que harian ahora que el resto de sus vidas juntos comnezaba.
Esa tarda solo caminaron de la mano, caminaron y hablaron, se besaron y caminaron, rieron y soñaron, jugaron a preguntarse hipotéticos, se besaron, caminaron, se amaron. Todo era perecto en su mundo, ellos se tenían y nada mas importaba.














Ese día era un día como cualquier otro en "Cuarto de Luna", Effy estaba tomando unos mates y actualizando unos inventarios, al menos eso se podría decir, que era un día como cualquier otro. Lo que Effy ignoraba y con toda razón ya que hasta ese día nada tenia que ver con ella, era que el señor Astor, padecía cáncer de próstata hacia ya 6 meses y que la noche anterior había recibido la visita de su hija, yerno y nieto, por lo cual se desvelo y no escucho la alarma, lo que como consecuencia haría que llegara tarde a su tratamiento. El señor Astor era un hombre de negocios, siempre estaba al teléfono haciendo todo tipo de tramullos, vendiendo y comprando esto y aquello. Llegar tarde a su tratamiento implicaba que se retrasaría en una importante reunión que tenia pactada, y que si salia como lo planeaba, significaba que se jubilaría con todos los beneficios que siempre quiso y tendría tiempo para lidiar con su enfermedad.
Astor salio al humo de su casa, subió al auto y manejaba lo mas rápido que podía, adelantándose a otros autos cuando podía.







Mientras Astor se acercaba, Effy salio afuera a recargar de agua el tazón y dejar un poco de alimento para gatos en frente a "Cuarto de Luna" , hacia semanas que una garita y sus crías totalmente famélicos habían aparecido frente a la tienda, y Effy como buena amante de los felinos comenzó a alimentarlos.
Estaba terminando de dejar la comida, mientras hablaba con los michis y los mimaba.








Ese día Zewi estaba en el departamento esperando un paquete, había pasado semanas enteras viendo por internet un anillo, "El Anillo" con que serraría el trato con Effy para siempre. Sonó el timbre, Zewi respondió, era el mensajero. Le respondió que ya bajaba a atenderlo.
Agarro las llaves del departamento y se dirigió al ascensor, vivían en un piso 22 con Effy. Cuando llego al ascensor noto que las puertas estaban abiertas ya que sus vecinos los "Caferata" estaban dentro, no hay razones para explicar porque a Effy y Zewi no les caían bien los "Caferata" o al revés, simplemente no congeniaban y punto. Por lo cual Zewi decidió hacer de cuenta que se dirigía al solárium del edificio con la intención de aguardar el siguiente ascensor. Esto hizo que demorara casi 20 minutos en encontrarse con el mensajero. El lo esperaba ya un tanto exaltado, recién iba mitad de recorrido en su día, por lo cual no tenía la mejor de las caras




Termino de entregar el paquete a Zewi y se subió a toda a prisa a su bicicleta para seguir con su trabajo. Tomo la avenida principal y se dirigió a máxima velocidad, esquivando autos y en ocasiones sin pararse en los altos, así fue como llego a la esquina de "cuarto de Luna", unos segundos antes casi choca con un peatón que quiso cruzar la calle a mitad de cuadra, lo esquivo, pero perdió la concentración mientras retomaba el control y miraba hacia atrás para putear.
En esa esquina venia llegando Astor, con el manos libres y en una llamada, noto que su celular se quedaría sin batería, por lo que abrió la guantera para sacar el cargador. Todo ocurrió en un instante, el mensajero al ver que se dirigía de lleno contra el auto, hizo lo que pudo para esquivarlo, y Astor al levantar la vista y ver a un joven en bicicleta que se estrellaría contra él, volanteo subiendo sobre la vereda de "Cuarto de Luna",
Ese día Zewi contesto una llamada con noticias que le cambiarían la vida para siempre, al escuchar la voz que le decía lo que paso, no dijo nada, soltó el teléfono y se tiro al suelo en posición fetal, en ese momento el mundo habita terminado, todos sus sueños esfumados, solo quería desaparecer.